Subida a Portman más 156 kilómetros para soltar piernas

30.03.2014 - MAIKEL | PORTMAN

Los componentes del club ciclista Alejandro Valverde se dan cita para su habitual salida a Portman. Como figuras nuevas a destacar en el viaje, contamos con la presencia de Diego y Alejandro Cánovas.

Tras solventar con calma el Garruchal (por ordenes de Juanjo) y pese a los kilómetros que nos esperan (sobre todo porque no tenemos claro el camino de ida, ya que nos andamos metiendo en urbanizaciones que no tienen salida), continuamos el viaje con un ligero viento placentero de culo, el cual nos hará llegar a Portman en un plis-plas y sin apenas darnos cuenta.

Tras pasar por la redonda de Pascual, llegamos al cruce fantástico donde todo el mundo pone su marcha. Diego solo quiere meternos los pelos, apenas ha visto el primer eucalipto y ya está diciéndonos que si nos vemos arriba, cosa que Juanjo no va a permitir y menos jugando casi en casa. Diego se nos va, pero Juanjo es sabio y sabe que nos espera una larga bajada; le pregunto por noticias y me dice que la única importante es que no nos vea muy de cerca en esta primera subida y se crezca aun mas.

Así es, una ligera bajada hace que los tres volvamos a ser amigos y pasemos por la bahía hablando y tranquilos. Mientras tanto Pascual le enseña a Alejandro lo que es subir Portman en bici con cabeza y sabiduría. 

Comienza la ultima rampa hacia el campo de Golf, Diego pone de salida un ritmo demoledor que será difícil de alcanzar, se va unos metros, trato de seguirlo, pero sé que ese no es mi ritmo, vuelvo a esperar a Juanjo que no anda muy lejos, continuamos la subida. Diego se fue, pero parece que nos podemos acercar,  lo vamos teniendo más cerca, pero no queda mucho, Juanjo cambia el ritmo, Diego cada vez está más cerca de nosotros al igual que la cima, pero va a ser  imposible cogerlo en los metros que quedan, yo tengo que soltar a Juanjo me ha liquidado en ese cambio. 

Como era de esperar Diego 1º, Juanjo 2º, yo 3º, y en cuestión de poco Pascual y Alejandro.










Tras el reportaje fotográfico habitual  y sin esperar mucho comienza la vuelta. Todos sabemos que en aquella zona siempre sopla un poco de aire, lo que no contábamos es que esa preciosa brisa que en este caso nos daba de cara nos iba a acompañar hasta nuestra vuelta a cabezo de torres.

Pienso, es cuestión de ponerse a tirar y entre “TODOS” seguro que el camino de vuelta será más ameno (exceptuando a Alejandro que bastante bien se portó con la ida, subida y vuelta).

Destacar a Diego (que exceptuando un momento puntual en el cual le vino a dar “ El tío del Ladrillo” y no el del mazo, hizo un gran trabajo junto a mí, me da la gana de decirlo, de ir tirando la mayoría del tiempo del grupo, tanto a la ida, como sobre todo a la vuelta. Y También destacar de este hombre que un fantástico cantaor de flamenco, lástima que Juanjo no le acompañó en su coros.
Por lo demás, una estupenda salida en bici, y la cual no estaría mal volver a repetir muy pronto y  a ser posible con todos los componentes del Club.